Entrevista Graciela Hernández

¿Qué te motivó a participar del Concejo?

Me empecé a relacionar cuando comencé a hacer talleres en un centro cultural, con algunos compañeros nos entusiasmamos y dijimos: “Si de afuera no podemos, capaz que estando adentro podemos hacer más por nuestro barrio”. Me gusta mucho lo que hacemos y ver que detrás de cada cosa que se hace en el territorio hay un granito puesto por el Concejo Vecinal.

¿De qué forma trabajan para el barrio?

A veces los vecinos nos hacen llegar sus problemáticas y si tienen algo en trámite les hacemos seguimiento. Siempre nos estamos acercando, además como andamos en el barrio nos conocen a todos y saben que estamos atentos. También trabajamos mucho con el área social, tenemos una asistente social, Laura Brit,que está asignada a trabajar con el Concejo y le dedica mucho al adulto mayor.

Siempre aportamos en lo que tiene que ver con las plazas y hemos realizado desfiles de Carnaval. Ahora nos reuniremos con el liceo Dámaso para hacer algo por el Día del Patrimonio. Por otro lado, en el medio de La Blanqueada tenemos al Club Nacional de Football que es una gran problemática, el barrio está muy destrozado y la gente muy desencantada. Entonces, a pedido del Concejo Vecinal, por los daños y perjuicios causados en el barrio, la Presidencia tiene comprometido un centro cultural para la zona.

Estamos en un local dentro de un centro cultural. El espacio es un entrepiso chico en donde no podemos invitar vecinos porque no entramos, pero hay un local municipal disponible que fue asignado para el Concejo. Pensamos que eso nos va a hacer visibles y permitir que todos los vecinos se integren a comisiones.

¿Cómo se fomenta la participación de los concejales?

Se hacen talleres después que ingresamos a ser concejal, pero pienso que sería muy importante que se hagan antes, para que realmente entiendan su función y la responsabilidad que tienen al representar a un colectivo, que no puede hacer cosas que lo comprometan. Para mí es esencial prepararlos, que asuman que es una responsabilidad ante el vecino y que trabajemos todos juntos para ayudar al barrio sin colores y sin banderas. Es muy importante el trabajo que hacemos, siempre estamos detrás de las cosas del territorio pero nadie nos da visibilidad.

¿Han pensado en la forma de generar esa visibilidad?

Creo que con cartelera, logrando que los vecinos ingresen al local y difundiendo más sobre nuestra tarea. Pero creo también que la Intendencia debería respondernos y apoyarnos más. A veces pienso que somos como esa piedra en la rueda para la Intendencia, nos cuesta que los directores vengan. También hay que diferenciar el Concejo Vecinal del Concejo Municipal, de la Intendencia, al alcalde del director del Comunal, entonces no es fácil para el vecino entender a dónde dirigirse.

¿Qué le dirías a los vecinos para motivarlos?

Me gustaría decirles que deben acercarse a todos los concejos vecinales porque lo importante es su voz, ellos son los que dan materia para que se hagan cosas para el barrio, sin ellos los concejos no somos nada. Que se acerquen y traigan sus problemas pero que entiendan que no somos gestores y que nuestra función es asesorarlos en el trámite y acompañar el proceso. Además hay montón de cosas que pueden aportar porque tienen distintas inquietudes. Es fundamental que nos integremos más y que sea una cooperación de todos.

¿Qué expectativas tenés para este período?

Me encantaría ver que todos nos preocupamos más allá de nuestra puerta. Confío en algunos compañeros que sé que vamos a caminar juntos, me encantaría que todo el concejo se entusiasme y quede contento con el trabajo hecho, no importa lo mucho o poco, lo importante es hacer algo por el otro y que eso lo ponga contento y feliz.

Julio 2019