El cambio climático constituye uno de los desafíos más importantes a los que se enfrenta la humanidad, en la actualidad se habla de una emergencia climática. Esto implica que se deba “adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos” (Naciones Unidas, 2022). Uruguay ha formado parte de numerosos acuerdos internacionales que tienen por objetivo mitigar los efectos derivados del cambio y la variabilidad climática, y adaptarnos a ellos.
Las ciudades albergan la mayor parte de la población y juegan un rol importante en el desarrollo económico de los países, siendo que en ellas se concentra la mayor parte del patrimonio construido, la actividad económica y las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), pudiendo tener un impacto significativo en sus emisiones más allá de sus fronteras geográficas.
Por lo tanto, éstas juegan un rol fundamental frente a la emergencia climática y en el logro de los objetivos de desarrollo sostenible, habiendo impulsado a nivel mundial una serie de compromisos hacia los procesos de “carbono neutralidad”.
Como ciudad costera, Montevideo se encuentra particularmente expuesto a los efectos del aumento del nivel del mar, la intensificación de tormentas y eventos climáticos extremos, pero no debemos olvidar que como ciudad de más de 1.300.000 habitantes, las sequías pueden estresar la capacidad de acceso al agua potable, y los excesos hídricos pueden hacerlo propio con los drenajes. Trabajar en la resiliencia climática implica tomar medidas para adaptarse y mitigar estos impactos protegiendo la infraestructura, los recursos naturales y la seguridad de la población.
Antecedentes
En el año 2010 Montevideo integró el Plan Climático de la Región Metropolitana de Uruguay, siendo esta la primera experiencia de planificación y acción climática participativa con enfoque territorial a nivel subnacional.
En 2021, se desarrolla este nuevo Plan de Acción Climática para Montevideo que establece acciones específicas de mitigación y adaptación al cambio climático que contribuyan a la descarbonización y a la mejora de resiliencia para el departamento. Se trata de un documento estratégico donde se plasman los caminos que elige Montevideo para dar respuesta a los desafíos del cambio y variabilidad climática y que integra los compromisos asumidos a nivel internacional para llevar adelante un desarrollo bajo en carbono, acorde a la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030.
Ejes del plan
- Montevideo bajo en emisiones: una batería de acciones orientadas a lograr la neutralidad de emisiones de dióxido de carbono (CO2 ) para la década del 2040.
- Montevideo resiliente: un conjunto de acciones que posibiliten la adaptación y el fortalecimiento de la resiliencia, considerando la situación actual y escenarios climáticos futuros.
- Montevideo ecosistémico: contribución de las acciones a los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
- Montevideo comprometido: detalle de la gobernanza necesaria para alcanzar los objetivos y metas propuestos en el Plan.
En cada uno de estos ejes estratégicos se establecen líneas de acción con metas previstas a corto, mediano y largo plazo; y acciones a desarrollar para el logro de las metas propuestas.
Montevideo bajo en emisiones
Montevideo se compromete a alcanzar la neutralidad de CO2 durante la década del 2040. Para lograrlo se prevé acciones que permitan reducir y/o compensar sus emisiones de gases de efecto invernadero. Se propone trabajar en: transformación tecnológica, eficiencia energética, cambios comportamentales y remoción de gases de efecto invernadero.
Montevideo ecosistémico
Montevideo debe preservar y adaptar sus ecosistemas (rural, natural y urbano) a las condiciones cambiantes producto del cambio climático. Para esto se implementarán medidas de adaptación con el objetivo de reconocer, proteger y promover la biodiversidad del territorio para potenciar un proceso de desarrollo sostenible del departamento.
Montevideo resiliente
Montevideo debe aumentar su resiliencia frente al cambio y variabilidad climática. Para lograrlo se implementarán medidas de adaptación que permitan desarrollar capacidades institucionales frente a las amenazas climáticas, incorporar enfoques de resiliencia en la planificación, mejorar el desempeno de las infraestructuras frente a los efectos del cambio climático y promover la aplicación de soluciones adaptadas al clima.
Montevideo comprometido
Montevideo apuesta a comprometer a su población y organizaciones con la problemática y los efectos del cambio climático para dar una respuesta integral y participativa. Para alcanzar este objetivo se promoverán medidas que fortalezcan la participación de las personas, las organizaciones de la sociedad civil, el sector privado y la academia, procurando potenciar un cambio cultural en sinergia con las demás medidas de este plan.