Plaza Poveda: Otra forma de hacerse cargo y ser solidario
Antiguamente llamado Plaza Múnich, el espacio ubicado en Bv. Artigas y Enrique García Peña es un sitio lleno de historias. Con el apoyo de vecinos, vecinas, padres, madres y autoridades del centro educativo, la iniciativa electa permitirá la colocación de juegos saludables, luminarias, cartelería identificatoria de las especies de árboles y un sendero en donde se plasmarán los acontecimientos importantes que allí sucedieron. El portal PP dialogó con Karem Farías, madre de dos alumnas, y Antoinette Mayor, integrante del área institucional del colegio, quienes contaron cómo surgió la iniciativa entre los estudiantes del primer ciclo de secundaria.
¿Qué los llevó a presentar la obra?
Karem Farías. En el colegio se fue trabajando esta propuesta desde hace cuatro años cuando los alumnos junto con la profesora de biología comenzaron a indagar sobre la plaza, su historia y su naturaleza; a trabajar el espacio público en diálogo con la plaza. Se fueron construyendo distintas ideas hasta que llegaron a una común. Después se juntaron con las de los vecinos, que tenían además muchas historias de lo que era antiguamente la plaza Múnich. Los gurises tienen pila de ganas de participar en esto. Y es raro porque generalmente los PP son llevados a cabo por adultos. Lo que más les colgó a los gurises fueron los cerámicos. La idea es hacer un cerámico que sea un sendero de patrimonio y biología. Todo lo que tiene que ver con la naturaleza de la plaza, pero que además vaya contando cómo esta plaza se fue modificando desde lo que era la plaza Múnich hasta lo que es ahora. La idea es que lo pinten los gurises. Eso va a estar buenísimo.
¿Cómo se enteraron de la posibilidad de presentar un proyecto al PP?
Antoinette Mayor. Me parece que el Presupuesto Participativo está muy aceitadito, es algo que tiene muchos años. Está instalado en la ciudadanía y es parte de la forma de funcionamiento de la Intendencia.
¿Recibieron ayuda en la elaboración de la propuesta?
AM. Fuimos al comunal y el concejal Pepoli, la asistente social Margarita y el arquitecto Germán nos orientaron en qué era viable y qué no. La idea no es modificar la estructura de la plaza porque el vecino la quiere así, pero cuidada.
¿Qué expectativas tienen sobre la realización de la obra?
KF. Estamos hablando de que son chiquilines de primero, segundo y tercer año de liceo los que laburaron. Que tan chicos empiecen a hacerse responsables de los espacios que utilizan está buenísimo.
AM. Creo que tenemos la expectativa de la concreción y del cuidado del espacio. Me parece muy interesante poder hacer sitios para su utilización y que podamos disfrutarlos en conjunto.
¿Cómo fue el día de la elección?
KF. El día de la elección estábamos en la mesa electoral como centro de recepción y entre los papás nos íbamos avisando cuánta gente llegaba. Estaban también los adolescentes. Eso estuvo buenísimo. Los gurises mandaron por Whatsapp a todos los compañeros que no se olvidaran de venir los mayores de 16 años a votar.
AM. Además un alumno de sexto de secundaria se había presentado para ser concejal vecinal, entonces llegaron a un acuerdo entre los del segundo ciclo y los del primer ciclo para promoverse mutuamente. Unos al proyecto y otros al concejal. Estaba todo el mundo metido.
¿Qué valoración personal le otorgan a la herramienta?
KF. Para mí está bárbaro. Utilizar una herramienta así es generar participación ciudadana y responsabilidad desde chicos, es mostrarles que hay otra forma de hacerse cargo y ser solidario. Y si podemos ayudar a que esté en mejores condiciones un lugar que ellos disfrutan, mucho mejor. A la herramienta la usamos, funcionó y además tuvimos respaldo. Pienso que es una forma de empezar a hacer un ejercicio distinto que está bueno porque va desde otro punto, no desde una militancia sino de hacerse responsable de los espacios que uno usa.
