Centro Umbandista Reino de Mata
Nuestra Institución, Centro Umbandista Reino da Mata tiene por objeto el estudio e investigación de las culturas y religiones indígenas y africanas. Partiendo de esta premisa tomamos como estandarte religioso las religiones afro y umbandistas, en las cuales están contemplados los objetos de nuestros estudios e investigaciones. A su vez, nuestro centro propala una cultura de convivencia pacífica intra e inter religiosa, con el fin de lograr la paz, la armonía y la equidad social, en todo el territorio uruguayo y americano, a través del legado ancestral indígena y africano que le dieron origen a nuestros países. En lo que respecta a la convivencia pacífica intra religiosa, proponemos una convergencia de los distintos rituales afro y umbandistas en una sola unidad, porque entendemos que Umbanda es un conjunto de leyes divinas en construcción abierta. En este sentido es un método religioso y filosófico en constante evolución, adaptación y readaptación para el hombre moderno. Así, pues, Umbanda es una idea que se expresa y está en constante construcción y, como dijimos, se manifiesta de varias formas ya que la tradición oral se reformula constantemente. Las actuales manifestaciones de Umbanda son relecturas de las tres matrices que le dan origen: indígena, africana e indoeuropea. De modo que Umbanda es una religión que a través de sus jefes o caciques va creando sucesores que tendrán por delante la transmisión doctrinaria de los fundamentos de cada una de las casas religiosas. Otro de los fundamentos que nuestro Centro preconiza es la unidad y universalidad de todas las cosas, promoviendo una convergencia, producto del sincretismo y basada en la paz y armonía entre todos los afros y umbandistas. En la práctica, significa respetar todos los sectores religiosos, construyendo una convivencia pacífica entre todas las religiones afro y umbandistas, demostrando con ello que lo sagrado está más allá de nuestros rituales. Partimos de la base de que somos todos diferentes, no mejores, unos de otros.
Las riquezas de nuestras doctrinas (afros y umbandistas) se manifiestan en la pluralidad de percepciones y en la diversidad de cultos, algo que es muy importante en una sociedad secular, agnóstica y atea como la nuestra. Ante este panorama, nuestro Centro manifiesta que las diferencias deberían unir y no separar, porque lhacen a la riqueza de las religiones afro y umbandistas. No aceptamos las desigualdades, proponemos la unión de las diferencias que enriquecen y brindan una convivencia pacífica a través del respeto por el diferente. Nosotros, los afros y umbandistas, bien sabemos que la discriminación y segregación que hemos sufrido durante tantos años nos han ubicado como cultura de periferia, estigmatizados como idólatras paganos y marginados por la sociedad que aún nos observa con recelo y desconfianza. Nuestro modesto trabajo de investigación y estudio sobre las comunidades indígenas y africanas nos ha hundido en profundos cuestionamientos sobre nuestra convivencia religiosa y social. Pues sí, esos valores y principios momentáneamente olvidados nos han interpelado en nuestra forma de vivir. Difundimos y propagamos principios y valores comunitarios transmitidos por las propias Entidades Espirituales, en cambio, optamos por vivir valores y principios que surgen de la civilización occidental judeo cristiana: la exaltación del individuo, la competencia, la egolatría y la falta de respeto por la naturaleza y las cosas sagradas. ¿Es este el paradigma de sociedad que todos queremos? Que una civilización haya triunfado sobre otra –y en este caso sabemos cómo fue– no quiere decir que tenga la verdad absoluta sobre la forma de vivir y convivir entre los seres humanos y la naturaleza.
Por lo expuesto, precisamos –a favor de la lógica y el buen censo– revisar conceptos que nos han dividido y promover nuevos valores y principios que surjan del ideario comunitario y religioso afro y umbandista, y no valores originarios de la civilización imperante que alimentan las diferencias y la competencia. Esperamos que la tan propalada libertad de expresión no sea un mito más que oficie como mordaza y límite ante todas las formas de percibir y entender lo sagrado, para que ello se manifieste libremente. Celebremos el retorno de la religión a su preciso lugar sagrado, del mismo modo a la ciencia, la filosofía y el arte.
Referente: Alexander Silvera
Fuente: Pagina Web
Correo electrónico: centroreinodamata@gmail.com
