Plan Departamental Participativo de Salud
Este plan busca consolidar una política sanitaria territorializada y con fuerte base comunitaria, articulando los tres servicios de la División Salud: Atención a la Salud, Regulación Alimentaria y Salubridad Pública. Se propone como una herramienta de planificación, seguimiento y rendición de cuentas, alineada al programa de gobierno y comprometida con la equidad, la participación y la justicia social.
El proceso de construcción del plan se caracterizó por su enfoque metodológico participativo. Las líneas estratégicas surgieron del diálogo con múltiples actores institucionales y sociales, apuntando a transformar el modelo de atención desde una lógica centrada en derechos. Los tres grandes ejes o lineamientos estructuran el plan en torno a objetivos y metas concretas.
Lineamiento 1: Fortalecimiento institucional
Este eje busca consolidar capacidades de gestión, planificación y evaluación dentro de la División Salud. Algunas acciones previstas incluyen:
- Mejorar los sistemas de información sanitaria y de gestión territorial.
- Promover la formación continua de equipos técnicos.
- Fortalecer los vínculos interdepartamentales e interinstitucionales.
- Fomentar una cultura institucional basada en la transparencia y la corresponsabilidad.
Se reconoce la necesidad de articular con otras áreas de la Intendencia y con organismos nacionales e internacionales para lograr una gestión más eficiente e integral.
Lineamiento 2: Fortalecimiento del primer nivel de atención y de su resolutividad
Este lineamiento apunta a mejorar la capacidad del primer nivel para resolver los principales problemas de salud de la población. La estrategia se centra en:
- Ampliar la cobertura y accesibilidad de los servicios de salud en el territorio.
- Reforzar el trabajo en red con actores comunitarios y del sistema nacional de salud.
- Potenciar el enfoque preventivo y promocional en salud.
- Mejorar la infraestructura, recursos humanos y equipamiento.
El objetivo es que el primer nivel resuelva al menos el 85% de los problemas de salud de la población, reduciendo derivaciones innecesarias y mejorando la continuidad y calidad del cuidado.
Se plantea además profundizar en los atributos clave de la atención primaria: primer contacto, integralidad, coordinación y continuidad.
Lineamiento 3: Empoderamiento y participación social
El plan reconoce que la mejora de la salud no es solo responsabilidad institucional, sino que requiere el involucramiento activo de la población. Este eje propone:
- Impulsar la participación ciudadana en la identificación de prioridades, diseño e implementación de políticas sanitarias.
- Apoyar redes y espacios de articulación comunitaria ya existentes.
- Promover la cogestión en salud a nivel barrial y municipal.
- Fomentar procesos de formación y sensibilización para el ejercicio de derechos en salud.
Se apuesta a la construcción de comunidades organizadas y empoderadas, capaces de incidir en las políticas públicas desde una lógica de corresponsabilidad.
Este plan busca:
- Fortalecer las capacidades institucionales para una gestión basada en la evidencia.
- Mejorar el acceso y la calidad de los servicios de salud, en especial en zonas con mayor vulnerabilidad.
- Promover prácticas de salud comunitaria con enfoque territorial.
- Garantizar procesos sistemáticos de participación social y empoderamiento.
Las metas específicas abarcan mejoras en la cobertura, la satisfacción usuaria, la articulación interinstitucional, y la consolidación de indicadores que permitan monitorear avances.
Es una herramienta de planificación y transformación que busca trascender la coyuntura.
Su construcción participativa, su enfoque territorial y su apuesta por un modelo de atención basado en derechos lo posicionan como un instrumento clave para garantizar el bienestar y la salud de la población montevideana.