Homenaje a Óscar Washington Tabárez

Óscar Washington Tabárez es valorado por su liderazgo y su compromiso con la identidad celeste. Nació el 3 de marzo de 1947 en Montevideo. Antes de dedicarse al fútbol, trabajó como maestro de escuela primaria en varios barrios de Montevideo. 

Como futbolista debutó en 1967 y se desempeñó hasta 1979 en clubes de Uruguay y del exterior, entre ellos Sud América, Montevideo Wanderers, Fénix, Bella Vista y el Puebla FC de México.

Tras su retiro como jugador, inició su carrera como entrenador en 1980 en las divisiones juveniles de Bella Vista. En 1983 dirigió a la selección uruguaya con la que obtuvo la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Caracas. Su trayectoria lo llevó a dirigir equipos en Uruguay, Argentina, Italia y España, incluyendo a Peñarol, con el que ganó la Copa Libertadores en 1987, y a Boca Juniors, con el cual se volvió campeón del Torneo Apertura 1992 tras 11 años de no ganar un torneo local argentino.

Dirigió la selección uruguaya en el periodo 1988 y 1990, y entre 2006 y 2021, convirtiéndose así en en el técnico con más partidos dirigidos en la historia de selecciones nacionales a nivel mundial, récord que alcanzó en 2016. 

Junto a la selección uruguaya obtuvo el título de Campeón de América en 2011, además de tres clasificaciones consecutivas a los Mundiales de Sudáfrica 2010 y Brasil 2014 y Rusia 2018. En estas clasificaciones se destacó el cuarto puesto en el Mundial Sudáfrica 2010.

Al maestro con cariño

La ceremonia, conducida por Ricardo Piñeyrúa y Claudia Umpiérrez, quienes contaron que la génesis del homenaje fue idea del profesor de Educación Física y entrenador deportivo, Marcelo Tulvobitz, quien envió un sentido saludo desde Costa Rica, donde se encuentra trabajando. 

El acto combinó testimonios presenciales con imágenes virtuales en las que jugadores nacionales y extranjeros, directores técnicos de otros países, músicos y dirigentes expresaban su admiración por Tabárez y su legado, a la vez que se proyectaban recuerdos de los hitos deportivos del período en que el cuerpo técnico encabezado por Tabárez, e integrado por Celso Otero, José Herrera y Mario Rebollo, estuvo al frente de la Selección Uruguaya de Fútbol.

El intendente Mario Bergara fue uno de los encargados de destacar la figura del maestro y el impacto que su mensaje y sus valores provocaron “no solo en el mundo deportivo, sino en toda la sociedad uruguaya”.

Recordó que Tabaréz devolvió al país la ilusión en su Selección Nacional “y gracias a su trabajo, ahora hay generaciones de chiquilines y chiquilinas que cada vez que juega Uruguay lo viven con expectativa e ilusión”.

Bergara destacó la humildad que este cuerpo técnico y sus jugadores transmitían y expresó su respeto, admiración y reconocimiento “por todos los valores que dejaron en la sociedad uruguaya”.

El intendente de Montevideo entregó la medalla correspondiente a la Ciudadanía Ilustre, concretando la declaración colectiva que la Intendencia había otorgado al cuerpo técnico y a todo el plantel que que compitió en el Mundial de 2010 en Sudáfrica. 

“Me invade una gran emoción y un agradecimiento enorme, infinito, porque el trabajo de Tabárez nos enseñó a todos a ser mejores personas y a respetar valores como el esfuerzo, la solidaridad, el trabajo en equipo, el respeto y la humildad.”, señaló.

Además, una maestra actual de la Escuela No. 53, a la que concurrió de niño Tabárez, leyó una emotiva carta de una madre que le narraba la importancia que había tenido la gesta de la celeste en el Mundial de 2010 en Sudáfrica, para la vida de su hijo, que padecía Síndrome de Asperger, y que estableció un vínculo afectivo e intelectual con la selección. 

Además, un grupo de niños de la misma escuela le entregaron una réplica del documento de su matrícula escolar que testifica su estudio en la escuela del barrio que lo vio nacer: el Cerrito de la Victoria; y la hija del DT Marcelo Broli, Ema, le hizo entrega de una obra plástica de su autoría.

También las asociaciones de técnicos y de preparadores físicos le entregaron presentes y reivindicaron su forma de ser y de trabajar en función de objetivos colectivos, así como un grupo representante de los trabajadores del Complejo Celeste, que también lo destacó por su aporte al procesos de institucionalización de la selecciones nacionales y la formación de jugadores. 

El evento incluyó canciones dedicadas a Tabárez y culminó con una gran cantidad de jugadores que participaron de los diferentes planteles de la selección, quienes subieron al escenario para abrazar a su maestro en el fútbol y en la vida. 

Óscar Washington Tabárez agradeció todas las muestras de afecto y de cariño y a todo el esfuerzo de quienes participaron en la organización "porque la fecha 10 de diciembre de 2025 entra entre las fechas más importantes que puedo haber tenido en mi trayectoria del fútbol".