Realojo asentamiento Candelaria
El programa de realojos y regularizaciones se trata de un emprendimiento conjunto de la Intendencia de Montevideo y el Ministerio de Vivienda, que tiene el fin de incorporar a la ciudad formal a miles de personas que durante décadas han sido excluidas.
El trazado de nuevas calles, la creación de espacios públicos y la construcción de viviendas dignas –entre otras acciones– apuntan a mejorar las condiciones de vida de los montevideanos y a construir nuevas relaciones entre quienes habitan la ciudad, de forma de tener un Montevideo más integrado socialmente.
Una nueva oportunidad para 70 familias
El realojo del asentamiento Candelaria se inscribió en un plan de recuperación de la zona del arroyo Malvín, que permitió que se recuperara para uso público. La primera etapa abarcó a todos los ciudadanos que vivían en sus márgenes entre Hipólito Yrigoyen y la calle Erevan.
- En el asentamiento habitaban 70 familias, de las cuales 48 se mudaron a la calle 6, entre rambla Euskal Erría y Espronceda, y 14 lo hicieron a Lapeyre y De Freitas, ambas en la zona de Malvín Norte. Las demás familias pasaron a residir en viviendas usadas, a través de un convenio con la Agencia Nacional de Vivienda.
- Las viviendas nuevas son dúplex en tira y de ladrillo visto, con 2, 3 y 4 dormitorios.
- El barrio cuenta con todos los servicios: saneamiento, redes de agua potable, energía eléctrica y alumbrado.
- La Intendencia invirtió $ 60.000.000 en la construcción de viviendas e infraestructuras y el Ministerio aportó los fondos para la finalización de las viviendas, que contó con la participación de los propios beneficiarios.
- Quienes recibieron las viviendas realizaron las terminaciones, como el contrapiso, la pintura, los muros de los fondos de su predio o alguna ampliación para otra habitación. La Intendencia les otorgó los materiales y ellos hacen el trabajo. Además, los beneficiarios se encargaron se construir las veredas del frente y del fondo de sus casas.
El proyecto, la dirección de obra y el seguimiento social se realizó con funcionarios de la División Tierras y Hábitat de la IM, quienes continuaron apoyando a las familias durante el período de adaptación a su nuevo hábitat y en realización de mejoras por autoconstrucción.