La importancia de las y los clasificadores en el proceso de valorización

El Día Mundial del Reciclador, oficializado así en el Encuentro Internacional de Recicladores que se realizó en Colombia en el año 2008 y reunió a personas de 34 países, conmemora la muerte de once trabajadores de reciclaje que fueron asesinados en la Universidad Libre de Barranquilla el 1° de marzo de 1992.

Año a año se dedica esta fecha a homenajear a todas las personas que desempeñan tareas de reciclaje y así recordar la importancia de su labor diaria para la sociedad y el planeta.

Actualmente más de 130 clasificadoras/es trabajan de forma manual en el proceso de valorización de diversos materiales reciclables en las cuatro plantas de clasificación con las que cuenta Montevideo: La Paloma, Durán, Géminis y Burgues.

Parte de la labor que realizan consiste en clasificar por tipo y color los residuos que ingresan a las instalaciones cada jornada, entre plásticos, cartones, papeles, vidrios y metales. Su rol es fundamental para que todo el material complete el proceso de trazabilidad y pueda ser reinsertado en el mercado.

Este es recolectado desde los contenedores que se encuentran distribuidos en todos los barrios, por camiones destinados especialmente a esa tarea y motocarros.

También provienen de los bolsones que se encuentran en edificios y cooperativas de viviendas, así como de otros puntos de entrega voluntaria en supermercados y grandes superficies.

El proceso forma parte de los diversos servicios habilitados por la comuna para recolectar, clasificar y procesar las 1.200 toneladas de residuos que generan los hogares montevideanos diariamente. Estos son implementados a través de la estrategia ambiental Montevideo Más Verde.

Carlos Ojeda realiza trabajos en la planta La Paloma desde hace ocho años. Para él la importancia del trabajo del clasificador reside en el aporte que realiza al recuperar y convertir “lo que es celulósico, plástico, metal, lo que venía siendo un problema para la sociedad, un elemento contaminante, en un elemento con valor económico y ambiental”.

Para Juan Mora, fundador de la cooperativa de La Paloma, es un orgullo dedicar su tiempo a esta tarea. "Sabemos que si no lo hacemos los materiales van a terminar en la tierra, acá los mejoramos y los podemos devolver al mercado. Es un trabajo digno y lo hacemos bien”, explicó.

Montevideo, comprometida con el reciclaje

Cada acción que lleva adelante la Intendencia para promover la revalorización de los residuos se implementa involucrando a la ciudadanía en la construcción de una nueva realidad ambiental.

Es así como se destaca la adhesión de vecinas y vecinos al programa de bolsones, la participación en los ecocentros itinerantes, iniciativa lanzada recientemente en distintos puntos de la ciudad, o el uso del Whatsapp para realizar denuncias en caso de advertir mal uso de los contenedores domiciliarios (092 250 260).