Gracias por el profesionalismo y el compromiso, gracias por cuidarnos

Los 12 de mayo se conmemora a nivel internacional el Día de la Enfermería, por el aniversario del nacimiento de Florence Nightingale, considerada la precursora de la enfermería moderna.

Desde la Organización Panaramericana de la Salud (OPS), este año la fecha se celebra bajo el lema "Enfermeras: una voz para liderar; visión para el futuro de la salud".

Además, el 2021 fue designado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el Año Internacional de las/os Profesionales y Cuidadoras/es de la Salud, con el fin de reconocer la labor de estos en el marco de la pandemia por el covid – 19.

En la red de policlínicas barriales de la Intendencia desarrollan tareas de enfemería 30 licenciadas y 20 auxiliares, junto a estudiantes que se desempeñan en carácter de becarias/os.

A su vez, en la División Salud también trabajan personas con formación en enfermería,  en la Dirección del Servicio de Atención a la Salud o en roles de asesoría, que se encargan de tareas de gestión tales como la coordinación de los puestos de vacunación y la realización de hisopados gratuitos.

En el año 2020, la atención por concepto de enfemería en policlínicas de la Intendencia fue del 34,61% respecto al total.

Primera línea de cuidado

Silvia Mora es licenciada en Enfermería y hace 11 años que trabaja en la policlínica del barrio Buceo. Tiene experiencia en otros niveles de atención y en el sistema de salud privado. Además, desde el año 1996 ejerce la docencia en la Facultad de Enfermería, en el Departamento de Salud Comunitaria.

Para Silvia, el rol de la enfermería está vinculado estrechamente a la protección y promoción de la salud, en lo que se conoce como primer nivel de atención: los diagnósticos precoces, los tratamientos oportunos, la rehabilitación y la reinserción social. También se relaciona con la docencia, la asistencia, la investigación y la gestión.

“En teoría, el primer nivel de atención tendría que resolver entre el 70 y 80% de los problemas de salud de la gente. Si no se resuelve allí, debería pasar a otro nivel de atención; va creciendo de acuerdo a la tecnología y a la capacidad diagnóstica que se tenga. Se dice que al subir el nivel aumenta la complejidad, pero en realidad es según lo que consideremos como complejidad. En el primer nivel de atención tratamos situaciones más extensivas, que también hacen a la dificultad del abordaje de la salud de esas personas y familias” explicó.

Respecto a las tareas que el personal de enfermería lleva adelante en las policlínicas, Silvia comentó que se hacen consultas a domicilio, controles de salud, seguimiento en controles de niñas y niños, de pacientes crónicos, y actualmente hisopados.

“Cada policlínica tiene su pata fuerte, en donde uno puede desarrollarse. Lo bueno es que en la Intendencia hay libertad para moverse y a todo lo que se propone, por lo general se le da para adelante, se apoya. Eso también facilita mucho la tarea” añadió.

Las policlínicas, al ser servicios de salud descentralizados, permiten brindar información específica de los barrios. “Trabajamos mucho a nivel territorial: hacemos diagnósticos de salud o análisis de situación de salud de un territorio. Identificamos necesidades, intereses y elaboramos planes de atención para la solución de esos problemas. Es muy amplio, porque no solo trabajamos con personas en forma individual sino también con familias y comunidades enteras” señaló Silvia.

Trabajar en pandemia

Silvia cuenta que la labor de las y los enfermeros en las policlínicas cambió sustancialmente por la pandemia del covid – 19. “Fue muy abrupto al comienzo, con todo el despliegue de herramientas y situaciones que tuvimos que prever. Nos tocó elaborar muchos protocolos de atención, para que todas las policlínicas de la Intendencia trabajáramos de la misma manera. Fue un gran desafío”.

Sin embargo, reconoce fortalezas en el proceso de adaptación, en parte, gracias al trabajo en equipo. “El trabajo colaborativo, interdisciplinario y las coordinaciones fueron muy importantes. Tuvimos que coordinar con otros centros de salud, se ampliaron los horarios y en algunas políclinicas se extendió hasta los días sábados la atención. También nos tocó coordinar lo relacionado con la campaña de vacunación contra el covid - 19 y hubo mucho movimiento de compañeras/os para cubrir otras otras áreas”.

Pensar la salud en clave de comunidad

Silvia comenta que comenzó a estudiar enfermería “sin saber muy bien lo que era; después me apasioné”.

“Ya como estudiante me enamoré del primer nivel de atención, de lo que puede llegar a hacer un licenciado en enfermería. Todo el potencial que tiene”, subraya.

Respecto a las gratificaciones vinculadas a su profesión, Silvia señala que las satisfacciones más grandes tienen que ver con el contacto con el otro. 

"En policlínicas en particular, después de 10 años de trabajar con la misma población, una genera un vínculo y acercamiento con determinadas familias que las vas siguiendo en el transcurso de toda su vida. Eso no tiene precio, verte reflejada en esa construcción que va haciendo el otro es maravilloso”.